Seguro que muchos recordaréis esta foto o habréis oído hablar de la mayor evacuación en helicóptero de la historia de EEUU, el acto que marcó el final de la Guerra de Vietnam. Pero menos conocida es la historia de uno de los aterrizajes más memorables que se produjeron entonces, un 29 de abril de 1975, un día antes de la caída de Saigón, cuando el Mayor de la Fuerza Aérea de Vietnam del Sur Buang-Ly comenzó una audaz fuga volando hacía el mar cargando a su esposa y sus cinco hijos en una avioneta de dos plazas Cessna O-1 “Bird Dog”.
Con tan sólo una hora de combustible divisó el portaaeronaves USS Midway y dejó caer una nota sobre él, pidiendo si podían despejar la cubierta para que pudieran aterrizar. Sabiendo que no había espacio para que esto sucediera, el oficial al mando del barco, el Capitán (más tarde almirante ) Lawrence Chambers ordenó tirar por la borda más de 10 millones de dólares de la época en helicópteros UH-1 Huey para que esta avioneta pudiera salvarse.
La Cessna O-1 «Bird Dog» despegó de Con Son, una isla al sur del Vietnam continental, por la mañana. Sorteó varios ataques antiaéreos norvietnamitas y logró llegar al mar, donde comenzó la búsqueda de los buques navales de Estados Unidos que estaban en la zona recogiendo a los que huían de la inminente caída del país.
Según cuenta la página de la Wikipedia sobre el USS Midway, quiso la suerte que se las arreglaran para localizar a este portaaviones, uno de los mayores buques de guerra construidos por el hombre con casi 300 metros de eslora y donde estaban aterrizando varios helicópteros de evacuación en ese momento.
Miembros de la tripulación a bordo del USS Midway vieron a la pequeña avioneta, pero los intentos de ponerse en contacto con ella por la frecuencia de emergencia fallaron y la aeronave empezó a dar vueltas, mientras observaban que venía sobrecargada con más de cuatro personas, lo que hacía casi imposible un amerizaje en el mar.
Sin embargo, la Cessna comenzó a pasar sobre el portaaviones lanzando notas. Esto ocurrió tres veces antes de que el Mayor Buang-Ly lograra dejar una nota sobre la cubierta en la cuarta pasada. Esta nota decía simplemente: «¿Podrían mover los helicópteros hacia el otro lado para poder aterrizar? No puedo volar más de una hora, ¡Por favor ayúdenme! Mayor Buang, esposa y 5 hijos»
El capitán del USS Midway, Larry Chambers, rápidamente ordenó sacar todos los helicópteros de la cubierta; y si no se pudieran mover lo suficientemente rápido, tenían que ser empujados a un lado de la nave; y, si no, lanzados directamente al agua. Ordenó a todos y cada uno de los operarios del navío que ayudaran en esta insólita mudanza.
Una vez que la tarea había terminado y la cubierta estaba despejada, la Cessna se alineó con el portaaviones. El techo de altitud era de 500 pies, la visibilidad reducida a 5 millas, y comenzó a llover. Para empeorar las cosas, el viento empezó a soplar a 15 nudos y 5 helicópteros más habían aterrizado mientras tanto en el USS Midway.
El capitán ordenó que esos helicópteros inmediatamente también se empujasen al agua mientras el barco viraba y se ponía a una velocidad apropiada para el aterrizaje, estimándose que más de 10 millones de dólares en equipo acabaron en el fondo del Mar de China ese día.
Mientras tanto, el equipo de radio empezó a trasmitir numerosos mensajes sobre las corrientes descendentes generadas detrás del portaaviones. Los tripulantes se alinearon en la cubierta, mirando como la Cessna hacía su aproximación final.
Testigos informan que nadie respiraba en ese momento. Sin embargo, el mayor Buang-Ly logró un aterrizaje perfecto en el zona adecuada: la avioneta aterrizó, rebotó una vez y se detuvo casi a la altura del puente del USS Midway.
https://www.youtube.com/watch?v=so9XRUbBGj8
Los miembros de la tripulación inmediatamente rompieron en ovaciones e invadieron la zona, aplaudiendo y felicitando al mayor, que fue escoltado hasta el Puente de Mando donde el propio capitán le felicitó por su excepcional aptitud para el vuelo y su valentía al arriesgar toda su familia en semejante apuesta, sin tener la certeza de poder aterrizar en un portaaviones.
Su destreza fue premiada cuando los tripulantes del USS Midway crearon un fondo para ayudar al mayor y su familia a instalarse en los Estados Unidos, donde hoy viven felizmente. La avioneta Cessna todavía puede verse hoy en el Museo del Aire en Pensacola, Florida.
Y en abril de 2010, para conmemorar los 35 años de aquella operación de rescate, el personal que le ayudó a aterrizar y el Mayor Buang-Ly volvieron a encontrarse en la cubierta del USS Midway, dándose de nuevo un buen apretón de manos para honrar a un buque de guerra que logró rescatar a más de 3.000 survietnamitas durante la caída de Saigón en 1975.
Fuentes y fotos: Orange County Register, Wikipedia y Letters of Note. Vía: la portada de Reedit
Y si quieres ver como se vivieron esos momentos, no dejes de ver este video con un montaje de aquel día en HD (vía fabio.com). El lanzamiento de la nota es a partir del minuto 7:45
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