Cada año decenas de concursos salen y entran de las parrillas televisivas, en la mayoría de ocasiones, reciclando viejas ideas con desigual fortuna: preguntas y respuestas, concursos de cantantes o las fórmulas habituales. Pero hay concursos que están mejor donde están: durmiendo el sueño de los justos y en los recuerdos de los telenostálgicos. Conceptos y pruebas desfasados que no se atreven a reciclar ni en las teles autonómicas. Por más que el ‘revival’ esté de moda, os presentamos los éxitos del pasado que se la pegarían en audiencia hoy día.
Triunfaba allá por… 1966
¿En qué consistía? La mecánica del programa enfrentaba a dos equipos de sendas escuelas en pruebas en las que se combinaban rondas de preguntas culturales y habilidades deportivas.
¿Por qué ahora no triunfaría? ¿Qué significa el adverbio latino haud? ¿Qué músico compuso Caprichos Andaluces? ¿Dónde nació el infante don Juan Manuel? Los planes de estudios de aquella época, por trasnochados, sonarían a chino a nuestros estudiantes actuales.
Triunfaba allá por… 1985
¿En qué consistía? El «osado concursante» tenía que realizar pruebas disparatadas para conseguir kilómetros para hacer un viaje, mientras un bisoño Jordi Hurtado (que por aquel entonces ya tendría unos mil años) no hacía más que llamar a los forzudos González y González cada vez que el participante finalizaba con éxito alguna de las pruebas.
¿Por qué ahora no triunfaría? En aquella época se viajaba con Iberia y lo hacía muy poca gente. Con la llegada del low-cost, incluso un viaje a Japón te puede salir a un precio muy asequible. El premio parece poco impresionante para tanto desbarajuste.
Triunfaba allá por… 1987
¿En qué consistía? Responder preguntas de cultura general y, finalmente, una super pregunta rebuscada a más no poder en la que se iban consultando libros y enciclopedias para dar con la solución, mientras Constantino Romero te metía prisa poniendo la voz de Darth Vader.
¿Por qué ahora no triunfaría? Todo se haría con Google, Wikipedia y CRTL+F…. y tendría muy poquita gracia.
Triunfaba allá por… 1992
¿En qué consistía? Lo presentaba Jesús Puente y el objetivo era gastar un millón de las antiguas pesetas por teléfono, llamando a partir de las 21:00 h, cuando las tiendas estaban cerradas. Y con la única ayuda de las páginas amarillas de la guía telefónica.
¿Por qué ahora no triunfaría? Con Internet podrías gastar un millón de euros en apenas unos segundos, comprando por ejemplo un Lamborghini Reventón a cualquier hora.
Triunfaba allá por… 1984
¿En qué consistía? Miguel de la Quadra-Salcedo seguía las órdenes de los concursantes desde un helicóptero, buscando unas coordenadas para encontrar un tesoro que podía estar oculto en cualquier parte del planeta. Isabel Tenalle desde el plató servía de enlace con el intrépido explorador, al que apenas se le escuchaba con el ruido del rotor.
¿Por qué ahora no triunfaría? El espectador no podría evitar pensar que «con un GPS lo encuentro yo en 5 minutos». Los fans del ‘geocatching’ lo hacen todas las semanas y nadie hace concursos sobre ellos.
Triunfaba allá por… 1990
¿En qué consistía? Una sucesión de caricatos trataban de hacer reír al concursante, cuyo objetivo era aguantar estoico los chistes sin esbozar ni la más mínima sonrisa. No solía costarle mucho.
¿Por qué ahora no triunfaría? Los cuentachistes están muy pasados de moda, pero tampoco un carrusel de monologuistas funcionaría nunca. ¿Quizá un «No te indignes que es peor», con los concursantes viendo un telediario?
Triunfaba allá por… 1995
¿En qué consistía? En cada episodio, parejas de concursantes corrían despavoridas por un castillo real de la geografía española, siguiendo las pistas que el rey Folof (ni más ni menos que Anthony Quinn) proporcionaba para que pudieran hallar la celda donde estaba encerrada la princesa, que cada semana era una señorita distinta (por allí pasaron desde Anne Igartiburu a Leticia Sabater).
¿Por qué ahora no triunfaría? En su día fue considerado el programa más dilapidador de la historia de RTVE, por los elevados costes de su producción (ya solo el sueldo de Quinn se llevaba un pico). Además, hoy en día sería imposible grabar un concurso en castillos reales que son patrimonios históricos-culturales.
Triunfaba allá por… 1992
¿En qué consistía? En teoría, gente demostrando talentos. En la práctica, el respetable sólo estaba interesado en ver tonterías y reírse de Cañita Brava.
¿Por qué ahora no triunfaría? En YouTube tienes gente haciendo el bobo en cantidades ingentes. Imposible competir. Los talents vuelven a ser… pues eso. Para talentos.
Triunfaba allá por… 1994
¿En qué consistía? Cuatro participantes, disfrazados de astronautas, eran enviados a una nave abandonada en la que, presuntamente, debían medirse a todo tipo de criaturas, puzzles y pruebas físicas que llevarían sus capacidad al límite.
¿Por qué ahora no triunfaría? Porque era presentado por un Bertín Osborne caracterizado como una mezcla de Power Ranger y Chimo Bayo. Y sin él nada tendría sentido. El presentador venía ya caliente de ‘Contacto con tacto’ y tenía ciertos vicios adquiridos, como el de coronar los viajes a la velocidad de la luz con campechanos «pues ya hemos llegado» o el de narrar las pruebas tirado en el sofá estelar. Y hoy en día, Bertín solo se tiraría en el sofá de su casa… y por una cifra de seis ceros.
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Más retrotele en el Archivo de RTVE. Fuentes adicionales y fotos de Retrovisor, Wikipedia y Youtube.