El cine de terror no está solo para asustarnos. Que se lo digan a la saga de ‘Scary Movie’, que parodió con bastante acierto los títulos más famosos de este género. Sin embargo, en ocasiones son las propias películas que deberían darnos miedo las que nos provocan la risa e, incluso, el sonrojo. ¿Fueron creadas con esta intención o alguien pensó de verdad que estas escenas atemorizarían a alguien? Aprovechando que es #Viernes13, os presentamos una selección de momentos bochornosos de películas de terror, que solo pueden sacarnos como mínimo una sonrisa.
‘Birdemic’ parece una mala copia de ‘Los pájaros’, una de las obras maestras de Alfred Hitchcock. De nuevo, unos pájaros con pocas ganas de hacer amigos se dedican a atacar a los humanos. Ahora bien, los efectos especiales son algo patéticos: atención a esas aves rapaces insertadas por ordenador, que emiten sonidos como de gaviota y golpeadas de cualquier manera por unos actores armados con… perchas para colgar la ropa. Obviamente, la cinta se ha convertido en una película de culto-freak por méritos propios.
Lo típico que te dan un palazo en la cabeza cuando estás sentada y terminas rompiendo la silla. ‘Psicosis’ es una de las grandes películas del género, pero su segunda parte (con el mismo protagonista, Anthony Perkins) tiene momentos tan risibles como este. La anciana, por cierto, cayó muy bien al suelo y fue nominada al Oscar a la mejor interpretación de persona tendida en el suelo de una cocina.
¿Monstruos venidos del espacio exterior? ¡Qué va! Enormes conejos mutantes capaces de tumbarte y masticarte la cara como si fuera una zanahoria. Ver a estos tiernos animales en estampida y provocar tanto daño puede asustarte o enamorarte. Nos quedamos con lo segundo; y con esas imágenes de conejitos gigantes corriendo al trote y que emiten un sonido parecido al de un tigre. Adorables.
Esta cinta de terror escrita y dirigida por Stephen King tiene un argumento de lo más extravagante: un cometa pasa cerca de la Tierra durante tres días, en los cuales las máquinas comienzan a hacer cosas extrañas, entre ellas asesinar a la gente. Una película con toques de humor negro que tiene escenas impagables, como la que protagoniza la camarera del vídeo superior, que grita todo el tiempo: “¡Os hicimos! ¡No podéis hacernos esto! ¡Os hicimos!” (una gran cita para la posteridad) para luego sacar un bazuca como el que saca un refresco de la cámara. Por cierto, la banda sonora corrió a cargo de la banda australiana AC/DC, contenida en el álbum ‘Who Made Who’, metiendo un poco más de leña en el misterioso fuego de quién hizo a quién.
A finales de los 80, ‘Hobgoblins’, dirigida por Rick Sloane, intentó repetir el éxito de ‘Gremlins’, pero con unos muñecos muy cutres sin apenas expresión. Y, claro, viendo el tráiler cuesta asustarse con los bichos (que son feos, eso sí), que se tiran encima de ti sin mover ningún músculo de su cara o cuerpo. Se le ha considerado como una de las peores películas jamás hechas en la historia del cine. Aunque claro, con un presupuesto de 15.000 dólares y uno de los peores estudiantes de la escuela de cine de Los Angeles, según palabras de sus profesores, ¿qué nos podríamos esperar?
Una sesión de espiritismo se puede complicar si aparece por allí una cabra. El animalito al final también es poseído y aquello acaba como el rosario de la Aurora, con gente levitando y echando sangre por la boca. Bastante divertido, aunque creemos que la intención del guionista y director (Sam Raimi, reconocido por su labor como director con filmes de terror de bajo presupuesto como la trilogía de ‘The Evil Dead’) era otra. El famoso Greg Nicotero (‘The Walking Dead’) se encargó de los efectos especiales de la película. Su juguete favorito fue precisamente esta cabra mecánica que usaba para asustar a Raimi.
La que aquí se llamó ‘El Día de los Muertos Vivientes’ es una película de terror de 1985 dirigida por George A. Romero y la tercera de las seis películas que conforman la saga dedicada a los zombis que comenzó con ‘La Noche de los Muertos Vivientes’ (1968). Una de sus escenas más memorables es esta. Las manos negras que aparecen de repente en este vídeo pueden hacernos saltar de nuestro asiento, sin lugar a dudas. Pero la expresión que pone la mujer ya no tanto. Una cara que intenta transmitir miedo pero que provoca bochorno, con esos brazos que se mueven a cámara lenta, esa mano sobre un pecho y ese giro que no termina de darse.
El título de esta película no deja lugar a la imaginación: hay una cama endemoniada que come humanos. En ocasiones no consigue acabar con ellos, como le pasa al joven del vídeo superior, del que solo se come la carne de sus manos, disolviéndola con jugos gástricos hasta que se quedan en los huesos. Además de las manos de esqueleto de instituto que lleva el actor, lo mejor es la reacción de la chica: mira los huesos como quien contempla alimentos en un supermercado. Ni gritos ni llantos ni nada. Como si estuvieran de super bajón. No es para menos, teniendo en cuenta cómo se le han quedado las extremidades…
Las películas de terror suelen darnos valiosas lecciones vitales: no beses a tu pareja en un bosque tenebroso ni des de comer a tu mascota después de la madrugada… En ‘Prophecy’ pasa algo parecido. Nos aconseja que no durmamos con la cremallera del saco de dormir hasta arriba, que puede venir un monstruo a matarnos y no podremos salir, como le sucede al protagonista de esta escena. No obstante, resulta divertido ver a la víctima dar saltitos con el saco, por no hablar del golpe con el que se desintegra y que llena la pantalla de plumas.
Y cerramos con la típica película que pondríamos un año sí y el otro también si organizáramos un festival de cine cutre. ‘Mega Piranha’ tampoco ofrece lugar a dudas con su título: hay unas pirañas gigantes que salen del río para atacar a los humanos o para quedarse encajadas en los edificios con los que chocan. Uno de los momentos estrella es este, en el que uno de los actores repele a los peces dándoles patadas tumbado desde el suelo. Para algo debían de servir las clases de ‘kick boxing’ o practicar la pataleta cuando los únicos guiones que te llegan son de peces mutantes (o cosas por el estilo).
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Con información de The Slightly Warped Web y Wikipedia (1, 2, 3, 4)